Son muchas las violaciones que el consejo de defensa del ex ministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, atribuye a la fiscal del Distrito Nacional sobre las irregularidades en que habría incurrido cuando desempeñó el cargo. Tratándose de señalamientos tan bien fundamentados Reynoso no podrá alegar que perdió el caso por ningún tipo de presión, sino porque la persecución es insostenible y por no ajustarse al debido proceso.
Díaz Rúa tiene pleno derecho, como cualquier otro ciudadano, a una investigación imparcial, con apego a las normas consignadas en el Código Procesal Penal. Y sobre la base de las violaciones que alega a reclamar la nulidad de la investigación promovida por la representante del Ministerio Público. Por su connotación un caso de esa naturaleza no debe apartarse ni un ápice de las normas.
Los abogados de Díaz Rúa señalan que Reynoso ha observado un comportamiento procesal arbitrario y desleal, incumplimiento de la obligación de informar sobre el caso, además de calificar la investigación de ilícita e irrazonable. Con las especulaciones que rodearon la sorpresiva acción judicial la magistrada debe evitar protagonismo personal y fallas que contaminen la investigación, porque no le va a quedar a la medida el traje de víctima.
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