¡Obligado a comer caca…!

FUERA DE CÁMARA...

César Medina
Lobarnechea1@hotmail.com

Mucha gente ha quedado impactada por la revelación de que el Partido Comunista Dominicano llegó a “escarmentar” a un vicerrector universitario ordenando que un “comando” fuertemente armado le atragantara una gran cantidad de heces fecales después de secuestrarlo en el propio recinto de la Uasd.

De no haber sido revelado por su propio autor, difícilmente la gente habría creído que un hecho tan bárbaro haya sido ordenado por la dirigencia máxima de una organización marxista integrada por jóvenes intelectuales que prometían dignificar y liberar la sociedad dominicana.

Braulio Torres, que entonces era el “jefe militar” del PCD y miembro de su Comité Ejecutivo, narra cada detalle de ese hecho en las páginas 305 y siguientes de su libro “Cautivo de mi Verdad”. Él fue el responsable de integrar y encabezar el “comando” que ejecutó la acción.

Su narración, 33 años después, describe la forma impiadosa y cruel, al estilo de los bajos fondos mafiosos, en que se manejó un sector de la llamada izquierda revolucionaria en esos años de la guerra fría.

Parte de su narración...
“Fue de dominio público que el vicerrector (esta columna omite su nombre) había sido víctima de un asalto durante el cual le introdujeron en la boca un producto químico que motivó su ingreso en el Centro de Pediatría y Especialidades de la avenida Independencia... Quiero compartir lo que en realidad sucedió: En una reunión del Comité Ejecutivo (del PCD) el secretario general propuso discutir la posibilidad de escarmentar al vicerrector porque había tratado de muy mala manera a la compañera Emma (Tavárez Justo), que se desempeñaba como secretaria de la Rectoría.

“Narciso no dio explicación ni especificó el tipo de ofensa, sólo pidió un castigo, acompañó su solicitud del método que le interesaba de forma que fuera lo suficientemente contundente como para que sintiera el peso y el rigor del partido...

“Sugirió que se le llenara la boca de excremento como mensaje para que aprendiera a respetar. La propuesta fue acogida como buena y válida por todos los miembros del Comité, excepto por Carlos Dore. La compañera Emma era demasiado valiosa, dama por encima de todo, y nosotros nos sentimos ser Manolo, su hermano...

“Recayó en mí hacer efectivo el castigo y tratamos de hacerlo cumpliendo con los métodos que creíamos adecuados. Al ser una operación tan especial, nos abocamos a caracterizar al personaje en cuestión, valoramos sus hábitos de vida y las responsabilidades fuera de la casa de estudios.

Composición del “comando”
“El comando operativo estaba conformado por Daniel Santana, Manuel Cuevas, Manuel Guevara, Fausto López (Negro), José Durán, Jacinto Durán y, por supuesto, yo, que lo dirigía (...)

“Tuvimos dos intentos fallidos: uno, cuando se encontraba representando la universidad en una exposición de pinturas en una galería de Gascue, y el otro en un hotel al que fue acompañado...

“(...) Llegó la fecha del claustro universitario. Daniel y Manuel Cuevas ubicaron el vehículo, sería la medianoche cuando finalizó la actividad y el vicerrector, inocente de lo que le esperaba, llegó muy desprevenido a su automóvil, siendo atacado de inmediato.

(...) “Él logró morder la mano del compañero Fausto (que luego se le infectó) cuando le embutió el material de desecho en la boca...”

Cuando se publicó el secuestro, el secretario general del PCD se asustó y quiso desvincularse de lo sucedidoÖ Pero era ya muy tarde.

El académico sería luego el principal ejecutivo de una prestigiosa institución bancaria.