sábado, 10 de enero de 2015

CANTO EL AMANECER DEL NUEVO ANO.

Rebusto de emoción,
canto el amanecer
de un año nuevo,
excedido en copas,
tragos barriales,
pico botellas
zigzagueando
peligro
con hembras
en motoconcho.
Polimeros vasitos
desbordados
en alegre cofradía
y reencuentros,
asados en hornos
de lustro nuevo
en siglo 21.
El descorche
de la media noche
embriagó pajarillos,
embriagó la Lasaña ,
la Yuca y el Casabe,
Ebrios salieron
los adornos,
los escotes,
los coches con su frenos.
En la parranda escanció
la cresta de los gallos,
que a ritmo
de apretones felices
y de besos planeados,
estallaron cohetes
que hoy retumban
pesadumbre resaca
del año que se fue.
Aquí,
en Gurabo,
antiguo
campito santiaguense,
en casa
de Mamá Fella,
libando,
murmurando
cuchicheando,
no sólo celebramos
el dos mil quince,
y los demás días
placenteros por venir.
Brindamos la ilusión
del progreso real,
el gran derrumbe
del Neoliberalismo.
Celebramos,
que se abata el Ébola,
brindamos
un nuevo año
sin Dengue
ni Chincungunya.
Brindamos,
el desfilar
de las faldas cortitas,
la mejoría
de quienes
perdieron la fe,
y se marcharon
procurando
la esperanza.
Brindamos,
por los amigos,
por los familiares,
cuya pesada nostalgia
los devolvió
a la patria,
como lo hace Juanita
en las navidades
risueñas de mañanitas.
Entonces,
finiquitado aquel Ron,
cansado todo el rebaño,
sin ocultar la emoción,
yo canto el amanecer
del nuevo año,
CARLOS MARQUEZ
1-1-2015
Santiago República Dominicana

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