El sábado, la Asamblea Nacional de Cuba aprobó de urgencia, con la presencia del presidente Raúl Castro, la nueva ley de inversión extranjera, con la cual aspira a atraer inversiones que van desde los 2 mil millones de dólares hasta los 5 mil millones
El gobierno de la hermana República de Cuba ha comenzando a hacer realidad la apertura económica que había estado posponiendo desde el decenio de los noventa del pasado siglo.
El sábado, la Asamblea Nacional de Cuba aprobó de urgencia la nueva ley de inversión extranjera, con la cual aspira a atraer inversiones que van desde los 2 mil millones de dólares hasta los 5 mil millones.
Con esos capitales frescos, el gobierno de Cuba quiere modernizar su modelo socialista, siguiendo los pasos de China, para mejorar la calidad de vida de su gente y alcanzar las metas de crecimiento para los próximos años.
Cuba bien podría ser un mercado importante para los productos dominicanos, una vez que Estados Unidos ponga fin al embargo económico.
Pero al mismo tiempo, Cuba representa una competencia a la que hay que observar con atención, sobre todo en la industria del turismo y otros renglones del interés de empresas e inversionistas de Europa.
Hay que saludar la apertura económica de Cuba, al tiempo que nos preparamos para la competencia que pueda representar.
Ojalá los pasos dados por Cuba nos alienten a esforzarnos más para mejorar nuestra competitvidad y nuestra capacidad de atraer inversión sana.
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